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A río revuelto ganancia de pescadores
Si alguna vez hubo un río tan revuelto, es hoy. Nos ha tocado lidiar con situaciones que, si hubiéramos podido vislumbrar en el pasado, no las hubiéramos calificado de imprevisibles, ¡las habríamos calificado de imposibles!
Hace años que los gurús hablan de las nuevas habilidades profesionales y ponen sobre la mesa; habilidades para la toma de decisiones complejas, saber actuar en la incertidumbre, innovación constante, capacidad de adaptación al cambio, creatividad para buscar nuevas soluciones, ¿les suena?
Los profesionales del futuro, somos las personas de hoy. Se acabó la estabilidad, los planes a largo plazo, la previsión de una estrategia o business plan a 5 años. Hoy todo cambia de forma continua.
Las habilidades relacionadas con el 0 miedo al fracaso y la capacidad de adaptación al cambio ya no son diferenciadoras y destacables, ahora son una NECESIDAD, en lo profesional y también en lo personal. Sin duda, la estabilidad emocional es clave y la salud mental empieza a protagonizar espacio público de debate y reflexión.
Las herramientas que nos ayudan a mantener la tranquilidad, con el foco en nuestros objetivos y siendo capaces de sortear los constantes retos que supone la realidad cambiante, son todas pocas y entre ellas destaco las siguientes:
✔ Las habilidades emocionales. Siempre en lo más alto de la pirámide; Resiliencia, empatía, autocontrol, creatividad.
✔ Retar cada situación, cuestionarnos a nosotros mismo y no cuestionar “los cambios per se”, sino por el contrario, cuestionar nuestra actitud y opciones frente a dichos cambios
✔ No temer al fracaso. Muchas veces el miedo al cambio proviene del temor a no ejecutar los proyectos con éxito. Esto es un freno que hay que superar. Cambios constantes van unidos a prueba-error.
✔ Aprendizaje continuo. La curiosidad debe estar alerta siempre. Las nuevas situaciones nos llevan a nuevas soluciones y para llegar a ellas, nuevos procesos, nuevas herramientas. Y también, errores de los que aprender.
✔ Aceptación. Controlar la resistencia al cambio, una vez aceptada la nueva realidad, todas las habilidades están alineadas para la búsqueda de las nuevas soluciones.
✔ La flexibilidad. Hay que adaptarse. Si tuviera que hacerme un tatuaje, éste reproduciría la famosa frase popularizada por Bruce Lee: “Be water my friend”
Con todo esto, y dado que está muy claro que el río nos llega revuelto, seamos los pescadores mejor equipados, a la búsqueda de la ganancia prometida por el popular refranero español.