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¿Cómo ha evolucionado el teletrabajo en España?
Análisis, estadísticas y su evolución en el futuroYa han pasado más de 2 años desde el comienzo de la pandemia por el COVID-19, el cual ha cambiado nuestro mundo tal y como lo conocíamos, acelerando una serie de cambios sociales que hasta hace poco parecían inverosímiles.
Vivimos un cambio de era, tiempos en los que lo más común son los contínuos cambios, las nuevas tendencias y la digitalización de las empresas.
Pero la pregunta que nos surge es la siguiente: ¿está realmente preparado nuestro país para el teletrabajo?
El teletrabajo en España antes de la pandemia
El trabajo a distancia o teletrabajo ya estaba presente en nuestro país antes del comienzo de la pandemia, aunque es cierto que era minoritario en comparación con lo sucedido después de las primeras restricciones.
Antes de marzo de 2020, cuando comenzó la pandemia, España era el país europeo con menor incidencia del teletrabajo. Antes de esa fecha, tres de cada 4 personas no habían trabajado a distancia, solamente el 7,3% teletrabajaba a diario, un 5,3% lo hacía varias veces a la semana y un 4,6%, varias veces al mes.
Si bien es cierto que antes de 2020, gracias a los grandes avances tecnológicos, ya existía la posibilidad de teletrabajar en España, pero no fue hasta 2020 cuando se comenzó a extender el teletrabajo en las empresas con el objetivo de no frenar la actividad económica durante el confinamiento. Concretamente el 32% de la población comenzó a teletrabajar ese año (décimo porcentaje más bajo de la Unión Europea).
Por lo que en esos momentos España era el país menos preparado para el teletrabajo pero, con mucho esfuerzo y teniendo que afrontar ciertos retos para poder incorporar el teletrabajo; España finalmente se convirtió en el país donde más ha crecido esta modalidad.
¿Qué sucedió con el teletrabajo después de la pandemia?
Como comentamos anteriormente, la pandemia aceleró los cambios necesarios para poder hacer posible el teletrabajo e hizo que el 31,7% de la población comenzase a trabajar a distancia.
Pero, aún habiendo España aprobado la ley del trabajo a distancia en julio de 2021, a medida que se fueron levantando las restricciones, el teletrabajo fue cayendo hasta el punto de que en nuestro país se pasó de una media de 16,7 horas semanales de teletrabajo en el verano de 2020 a 15 horas en la siguiente primavera. Otros países que también recortaron sus horas de teletrabajo en este periodo fueron Bélgica, Alemania, Suecia o Luxemburgo.
A pesar del gran esfuerzo realizado por las empresas e instituciones para incorporar el teletrabajo durante el confinamiento y el resto del 2020, con el transcurso de los meses y el menor impacto de la pandemia, esta modalidad fue perdiendo fuerza en la sociedad.
¿Cuál será el futuro del teletrabajo en España?
Actualmente, España solamente permite teletrabajar el 35,6% de horas a la semana, a diferencia de otros países europeos como Portugal y Francia que están por encima del 45%.
Dos años después, esta modalidad ha caído en comparación con 2020 pero, aún así, se ha asentado, especialmente entre la población trabajadora, que lo defiende como una forma más de poder conciliar la vida laboral con la personal. Lo que se consideraba a priori como algo temporal o circunstancial se ha convertido en una necesidad y demanda cada vez mayor por parte de la población, además de convertirse en una oportunidad para que las empresas puedan captar y retener el talento.
Son muchas las personas que, a pesar de no haber restricciones, desearían teletrabajar, y de aquellas que ya lo están haciendo, el 39% desean mantener esa rutina; el 34% aumentar las horas y solamente al 26% le gustaría reducir ese tiempo.
Por todo ello, podemos ver claramente que hay una gran demanda por parte de la población española de que las empresas permitan el teletrabajo y, por consiguiente, de que se digitalicen y apuesten por ofrecer esta modalidad de trabajo a sus empleados.
Si las empresas toman verdaderamente conciencia de que nuestro presente y futuro es digital, que hay necesidades en la población de tener una mayor libertad, flexibilidad y conciliación con su vida personal y familiar, y de que, por tanto, es necesario contar con las soluciones tecnológicas adecuadas, no cabe duda de que el teletrabajo se incrementará en España a pasos agigantados.